El ex presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, reveló el domingo que debido a la ingestión de ciertos medicamentos, experimentó un estado de paranoia y alucinaciones. Estas condiciones lo llevaron a utilizar un soldador para intentar quemar la tobillera electrónica que utilizaba bajo prisión domiciliaria, convencido de que estaba siendo monitoreado. Sometido a una audiencia de control judicial un día después de su detención preventiva por riesgo de fuga, Bolsonaro explicó detalladamente los motivos detrás de sus acciones. La sesión era crucial para verificar su integridad física y garantizar el respeto a sus derechos fundamentales. Durante su arresto preventivo en la sede de la Policía Federal, en Brasilia, el líder ultraderechista compareció por videoconferencia para responder a las preguntas de la jueza auxiliar. El ex mandatario, que se encontraba en prisión domiciliaria desde agosto, fue detenido el sábado por las autoridades debido al riesgo inminente de fuga y la supuesta amenaza al orden público. Una de las bases para su arresto fue el hecho de haber admitido haber intentado destruir la tobillera electrónica asignada por el tribunal para vigilar sus movimientos.




